viernes, 29 de septiembre de 2017

Nous convertits (Conversos)

Todos los pueblos que nos han invadido, no nos han arrasado, ni matado a todo bicho viviente, como algunos nos quieren hacer ver. Los que vivíamos aquí, pasábamos de unas manos a otras, pagando sus impuestos, y trabajando en lo nuestro, que fundamentalmente era la agricultura, la principal riqueza de nuestra tierra.


En los libros de la iglesia, los llamados Quinqui libri, donde se empezó a registrar a la población, para tenerla controlada, se guarda toda la información referente a los bautismos, matrimonios, defunciones, confirmaciones y excomulgados. Es interesante comprobar como se van normalizando los apellidos, a la lengua que se hablaba aquí. Dado que el analfabetismo era la tónica general, muchas veces se escribía lo que se oía, sin duda, sin mala fe.

Me llamó siempre la atención la incidencia en el calificativo de "nou convertit", refiriéndose a moriscos, judíos y demás habitantes de este reino convertidos forzosamente a la religión católica de Roma.




Desde 1542, hasta el 1600, encontramos los siguientes apellidos en los libros de bautismos:
BEREDO, CABRERA, CANELLES, CABRILLO, CONDE, FERRER, FUSEIN, GARCIA, GORDO, GOTERRIS, MUSSA, POZO, SABATER, SAMPOL, SEBERT, VERMELL, VIANDA.